AUTISMO CON UNA DIETA SIN LEVADURA
Dieta sin levadura y autismo
El aconsejar una dieta sin levadura es una de las primeras cosas que oyen los papás que tienen un miembro con TEA en la familia. ¿Tiene esta creencia algún fundamento real? Lo veremos en este artículo.
Inicialmente, podemos decir que esta dieta es utilizada para combatir altos niveles de levadura encontrados en el intestino, que producirían un efecto tóxico. Existen varios tratamientos relacionados tales como los que incluyen agentes antifúngicos, agentes probióticos y adaptaciones en la alimentación. Son tratamientos comunes, aunque no hay mucha literatura -científica- que documente cambios en los rasgos autistas después del tratamiento.
1. Cándida en el intestino
En el artículo en el que se habló de los efectos del azúcar en la dieta, mencionamos el crecimiento de la cándida. Existen más de 150 especies distintas de levaduras de la especie cándida que habitan de forma natural en el organismo. De entre todas ellas, la Candida albicans es la que mayor importancia tiene para el ser humano, ya que ayuda a mantener el equilibrio intestinal. En algunos casos, cuando se altera ese equilibrio bacteriano, se produce una situación de disbiosis. De este modo, el desequilibrio de la microbiota normal favorece el crecimiento desmedido de la cándida. Ese sobrecrecimiento a nivel del intestino delgado es lo que se conoce como candidiasis intestinal
Sin embargo, nivel intestinal, los síntomas de esta enfermedad son vagos y poco precisos. Por ejemplo: dolor abdominal, meteorismo (exceso de gases en el intestino), diarrea, estreñimiento y distintos tipos de intolerancias alimentarias.Finalmente, si la situación de sobrecrecimiento de la Candida Albicans se mantiene en el tiempo, las alteraciones sobre la mucosa intestinal provocan cuadros de malabsorción. Estos pueden provocar: malnutrición crónica, irritabilidad, mareos y cefaleas.
La candidiasis se puede tratar con medicamentos antifúngicos, específicos para algunos tipos de hongos. También, suelen recetarse probióticos para restablecer el equilibrio de la microbiota (o flora) intestinal. Además, suele recomendarse una dieta específica.
2. Dieta para tratar la candidiasis
Para evitar el crecimiento de la cándida a nivel intestinal, deben establecerse dietas que restringen ciertos alimentos y bebidas, a saber:
• Los azúcares simples y refinados, así como levaduras, productos fermentados y los procesados. También los alimentos que posean un alto índice glucémico. (nota: El índice glucémico (IG) es una medida (un número de 1 a 100) de la rapidez con la que un alimento puede elevar su nivel de azúcar (glucosa) en la sangre. Únicamente los alimentos que contienen carbohidratos tienen IG. Los alimentos tales como aceites, grasas y carnes no tienen un IG)
• En un primer momento, se deben eliminar frutas, almidones, cafeína y embutidos, y huir del alcohol, quesos y lácteos, té, refrescos y bebidas energéticas.
3. La cándida y el autismo
Pese a que existe una clara falta de investigación tanto del género Candida ssp. como de todo el reino Fungien las personas con TEA, los estudios apuntan a una importante presencia de dicho género. Concretamente, en los resultados encontrados por un estudio específico, se destaca la mayor prevalencia del género Candidaalbicans en los niños con TEA. Sin embargo, aún se sabe poco sobre su implicancia (y la de otros tipos de hongos) sobre los síntomas gastrointestinales y la sintomatología del autismo.
Posibles signos de la presencia de cándida en tu niñ@ con TEA
- ¿Sufría o sufre paspaduras frecuentes de pañal?
- ¿Sufría de cólicos e irritabilidad?
- ¿Presenta ronchas, eczema u otros problemas de la piel?
- ¿Con facilidad adquiere pie de atleta o se le infectan las uñas con hongos?
- ¿Ha recibido varios tratamientos de antibióticos en el lapso de un año?
- ¿Ha tenido problemas de oído recurrentes?
- ¿Es hiperactivo?
- ¿Tiene problemas de memoria o aprendizaje?
- ¿Tiene períodos de atención cortos?
- ¿Es persistentemente irritable, infeliz o difícil de complacer?
- ¿Sufre de problemas digestivos frecuentes como diarrea, constipación, gases, etc.?
- ¿Se siente frecuentemente cansado o deprimido?
- ¿Se queja de dolores de cabeza, dolor de estómago o en los músculos?
- ¿El humo del cigarro lo molesta mucho?
- ¿No está bien y los análisis y estudios no han revelado la causa?
Introducción de una dieta sin levadura
En el caso de la alergia a la levadura, el cuerpo reacciona con la especie Candida albicans que es uno de los hongos más comunes y se puede encontrar en nuestra boca, piel o en el tracto intestinal, formando parte de nuestra microbiota o flora. A veces, la microbiota se altera perdiendo el equilibrio debido a una mala alimentación, situaciones de estrés, o por un tratamiento prolongado de antibióticos, los microorganismos «buenos» de nuestro cuerpo se ven desplazados. En ese momento la Candida o levadura se aprovecha de nuestra vulnerabilidad y la de los microorganismos «buenos» para expandirse libremente por nuestro sistema. Este exceso de cándida del que venimos hablando produce una reacción, compatible con un cuadro de alergia a la levadura.
1. Concretamente, qué eliminar de la ingesta
Empezar por las comidas que favorecen el crecimiento de Cándida. De este modo, se ayuda a eliminar los nutrientes que promueven el crecimiento de Cándida y levaduras que casi siempre, están presentes y en niveles elevados en niños autistas.
Para indicarla debemos estimar que hay sobrecrecimiento de Cándida en el intestino. El tratamiento mediante la dieta, mejora ampliamente la clínica del niño, eliminando los dolores de cabeza, dolores estomacales e intestinales y flatulencia.
2. Dieta sin levadura y otras dietas
Si se han leído y adoptado los consejos incluidos en los artículos sobre dietas sin gluten y dietas sin azúcar para personas con trastorno del espectro autistas, ésta dieta es simplemente un complemento.
Nos hemos detenido en el tema de la candidiasis, por considerar que es importante tener conocimiento de su existencia e implicancias. Especialmente dentro de los síntomas que pueden presentar niñ@s con espectro autistas.
En resumen, una dieta natural, de carnes, verduras, grasas saludables, semillas, frutos secos, legumbres, tubérculos, agua natural, etc. es una opción que va bien a millones de personas. Posiblemente, a toda tu familia en conjunto. Particularmente, a tus niñ@s. Se encuentren o no dentro del espectro autistas. Dentro de este panorama, positivo y de cambio de hábitos para hacerlos más saludables, deberíamos incluir una dieta sin levadura.